Toto Wolff compró acciones de Aston Martin, que pertenecían a su amigo Lawrence Stroll. Luego, el valor de mercado se incrementó mediante un acuerdo entre las fábricas británica y alemana. Fue acusado de abusar de su influencia para actuar.
A cuatro días de que se reanude la temporada de la Fórmula 1, una bomba estalló en el ambiente. Se trata de la investigación que involucra al jefe de Mercedes, Toto Wolff, y al dueño de la escudería Aston Martin, Lawrence Stroll, por una supuesta inversión irregular del team-manager austriaco para comprar acciones de la fábrica inglesa, que este año ingresó como equipo íntegro en la Máxima categoría.
Este viernes en el Autódromo de Spa-Francorchamps, sede del Gran Premio de Bélgica, los autos volverán a salir a pista luego de un receso de casi un mes por el verano europeo y el tema del día no fue la batalla por el título entre Lewis Hamilton (Mercedes) y Max Verstappen (Red Bull). La agenda del lunes la marcó el escándalo que envuelve a Toto Wolff y Stroll, y que tiene una historia previa. Noticias Internacionales.
Ambos son amigos y se conocen desde hace varios años. En enero de 2020 Stroll compró el 17 por ciento de las acciones de Aston Martin por 251 millones de dólares. Fue la maniobra estratégica para conseguir que la firma británica ingresara en la F1 con la base del extinto equipo Racing Point, que compró el magnate canadiense en 2019.
Por su parte, Toto Wolff compró en abril de 2020 el 0,95 por ciento de las acciones de la fábrica Aston Martin, que cotiza en la bolsa de Londres. Aunque no se hizo público cuánto pagó por ese porcentaje, de acuerdo al diario canadiense Le Journal de Montreal, habría desembolsado unos 36 millones de dólares.
Tras estas inversiones, Aston Martin y Mercedes Dock llegaron a un acuerdo que incluía el traslado de personal de empresas alemanas a empresas británicas. Por ejemplo, Tobias Moers, quien era el jefe de una subsidiaria de Mercedes AMG, se convirtió en el CEO de Aston Martin. En octubre, la empresa de Stuttgart informó que aumentaría su participación en la empresa londinense al 20% en un acuerdo que también incluye intercambios técnicos.
En el último año las acciones de Aston Martin se incrementaron en un 60 por ciento su valor. Según la investigación iniciada por el BaFin, Autoridad Federal de Supervisión Financiera en Alemania, Toto Wolff podría haberse valido de su posición como hombre fuerte de Mercedes y de su vínculo con Stroll, para realizar la transacción.
Se enteraron por Mercedes que cuando compraron su paquete compartido, Toto Wolff no sabía que se llegaría a este acuerdo con Aston Martin. Pero el anuncio de la nueva «asociación» entre los dos equipos coincidió con un aumento significativo en el valor de la marca británica, lo que aumentó la amistad entre millonarios austriacos y canadienses, y provocó la sospecha de BaFin.
La autoridad financiera alemana abrió la investigación en noviembre pasado, aunque remitió el caso a la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido para su revisión, porque como las acciones de Aston Martin cotizan en la bolsa londinense, no tiene jurisdicción para continuar con el proceso.
Si finalmente se demuestra que en Mercedes contaban con información privilegiada procedente de Aston Martin, Stroll, que a fines de 2020 se hizo con el 20 por ciento de las acciones para quedarse con el control de la compañía, podría enfrentarse a una multa multimillonaria que significaría un gran golpe a los intereses de la marca británica en términos bursátiles y deportivos.
En la escudería de F1 corre su hijo, Lance, y el alemán Sebastian Vettel, que en octubre de 2020 también adquirió acciones de Aston Martin. El cuatro veces campeón mundial lo admitió en diálogo con la revista Racer, pero no divulgó cuántas acciones compró.
Finalmente, en 2020, hay rumores de que Toto Wolff pasará de jefe de Mercedes a gerente de la factoría de Aston Martin. Al mismo tiempo, la controversia del «Mercedes rosa», los autos Racing Point (la flota que ya posee Stroll), están bajo escrutinio por su similitud con los autos alemanes.
Con Información de Infobae.