
Hace 40 semanas, una joven llamada Lucila Nieva tomó el vuelo UA818 desde Ezeiza con destino a Houston, Texas, Estados Unidos. Tenía sólo 22 años y quería hacer realidad el sueño americano.
En el camino, vio una película de Harry Potter y reflexionó: «Es complicado empacar tu vida en una maleta y viajar solo, lejos de amigos y familiares, sin saber qué pasará después, pero esta complejidad se repetirá una y otra vez. Por muy complicado que sea, debes aprender a crecer y dejar tu propia huella».
La joven tucumana fue encontrada muerta el viernes en una base militar, y las autoridades detuvieron a su esposo, el soldado Preston Sullivan, mientras se esclarecían las circunstancias del caso.
La pareja vivía en un barrio militar en Fort Cavaz, un suburbio de Killeen, Texas, donde se encontró el cuerpo en su casa.





