Esta es la historia de una familia que enfrenta la pérdida irrevocable de un hombre en la tragedia ocurrida el pasado sábado 27 de febrero, en el paso elevado de la avenida, junto a Máximo Gómez.
Se recordó que durante el incidente un gran muro se derrumbó y atropelló a alrededor de cinco vehículos que circulaban por la transitada vía.
Babylove Dovalier es madre y esposa que vivió la trágica muerte de su marido, Bonheur Dorvilien, y todo empezó cuando Bonheur llamó a Babylove a media tarde para advertirle sobre la cantidad de agua en la zona. «Sólo Dios sabe cómo vamos a llegar allí», fueron sus últimas palabras antes de que se cortara la llamada.
Babylove, que es haitiana, vio un vídeo en Facebook que relataba el incidente y no tenía idea de que su marido sería una de las víctimas. Horas después de recibir la llamada se enteró de la tragedia de su ser querido.
Bonheur y los vecinos Santana y su esposa, María Reyes, acompañaban a un amigo al aeropuerto cuando ocurrió el incidente. Santana y su cuñada sobrevivieron, pero Bonheur perdió la vida.
Babylove derramó lágrimas y dijo que Bonheur lo es todo para ella, él es la columna vertebral de la familia y se encarga de todo en la familia. Con cuatro hijos y un bebé en camino, se sentía perdida sin él.
Justo cuando esta gran tristeza la envolvía, la señora Babylove dijo que una de sus hijas cumplía años mañana y que la niña había estado esperando a que su padre le celebrara una fiesta de cumpleaños.
La esposa de Bonheur lamentó que él tenía documentos familiares, una billetera y dinero en efectivo que no le fueron entregados en el momento del accidente. Sólo recibió las llaves de una moto.
Uno de los familiares de Santana transmitió la triste noticia de la muerte de la esposa de Santana a la hija de Babylove, pero desconocía el estado de Bonnar. Fue entonces cuando Babilov llamó a un familiar al hospital para confirmar la trágica noticia de la muerte de su marido.