Este martes 30 de abril, el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional modificó las medidas coercitivas contra la pastora Rosy Guzmán y le otorgó la libertad condicional.
La presidenta del Tribunal, Esmirna Gisele Méndez, aceptó una solicitud para modificar las medidas coercitivas impuestas a los imputados en el caso Coral y revocó el arresto domiciliario y los grilletes impuestos al imputado como cabecilla de corrupción. El complot fue orquestado a través del Cuerpo de Seguridad Presidencial (Cusep) y el Cuerpo de Seguridad Turística (Cestur).
A Guzmán sólo se le prohibirá salir del país, para lo cual necesitará autorización judicial y una garantía financiera de 50 millones de pesos a través de compañías de seguros.
La pastora Rosy Guzmán, una de las principales imputadas en la Operación Coro, está acusada de malversar fondos públicos entre 2012 y 2020 para comprar raciones, combustible y nombrar personal policial y militar a los que pagó menos del 30% de su salario y el resto permanece en las manos de la red.
También se roban fondos de inteligencia a Cusep y Cestur para que la red retenga estos recursos.
El juez argumentó que la pena de tres años impuesta al acusada, que cumplirá su condena en mayo de este año, era desproporcionada.